Hoy en día la imagen que todos teníamos de las bodegas sigue en el recuerdo. Cuevas escabadas en la tierra a pico y pala, oscuras y con olor a tierra húmeda. Una imagen virtual de lo que en tiempos pasados fue el reposo del vino. A día de hoy siguen existiendo en memoria de los que con mucho esfuerzo trabajaron en ellas y como atractivo turístico.
Actualmente se han convertido en templos del vino, hoteles, restaurantes, museos y en obras de arte. No solamente orientadas a la elaboración de vinos si no como un reclamo del enoturismo y un símbolo de identidad.
Hemos elegido una serie de ellas que Lacasadebaco considera las más originales:
Marqués de Riscal (Ciudad del vino)
Un espacio con hotel, spa, restaurante, bodas, tienda… situada en la localidad de El Ciego (Álava) inaugurado en 2006 obra de Frank Gehry.
Ysios
Situada en La Guardia (Álava) goza de un enclave natural privilegiado. Inaugurada en 2001 es obra de Santiago Calatrava.
Castillo de Perelada
Considerado monumento histórico situado en Perelada (Gerona) es casino y posee una biblioteca muy amplia.
Irius
El la zona de Somontano en Barbastro (Huesca) con restaurante y diseñada por el arquitecto Jesús Marino Pascual.
Darien
Diseño vanguardista con restaurante en Logroño (La Rioja) abrió en 2007, la pena es que a día de hoy está cerrada.
Finca Villacreces
En Quintanilla de Onésimo (Valladolid) un espacio natural rodeado de pinos centenarios con sala de catas y enotienda.
Pazo Barrantes
Situado el la localidad gallega de Ribadumia (Pontevedra) es un antiguo, como su nombre indica, pazo del siglo XVI en el Valle del Salnés.