Bodegas Masaveu presenta sus nuevas añadas de Fillaboa y Murua con una original propuesta. Un viaje para los sentidos a través del vino.
Tras el breve descanso vacacional de las fiestas de Semana Santa retomamos la actividad. En esta entrada descubriremos la nuevas añadas de Bodegas Masaveu, un grupo de tradición familiar que elabora vino en diferentes denominaciones , bajo una filosofía ecológica de respeto por el entorno, por la tierra que les ve nacer. Vinos de calidad que expresan el «terroir».
La lluvia ese día no dio tregua, y lo que hubiese sido una presentación con vistas en la terraza del H10 Alcalá, se trasladó a una de las salas del hotel. El tiempo manda y condiciona en estas ocasiones. Un selecto grupo de assitentes entre los que se encontraban grandes personas del vino como José Peñin, Custodio López Zamarra o Jesús Flores, disfrutamos de la original propuesta, y por supuesto de los vinos de Bodegas Masaveu.
Un viaje a través de los sentidos….
Sentados, un antifaz nos tapa la mirada, la música relajante junto a unas embriagadoras palabras nos transportan en el espacio. Verdes laderas, interminables campos sembrados de viñedos bañados por el sol, la brisa atlántica cargada de salinidad mece las hojas. Viajamos a Galicia, lugar donde nacen los vinos de Fillaboa.
Una vez situados con los sentidos agudizados descubrimos nuestros rostros para catar dos Albariños. Fillaboa Albariño 2018 un vino sobre lías muy aromático, de notas tropicales, fresco. Fillaboa Selección Finca Monte Alto 2017 más complejo, de aromas cítricos, láctico, intenso. Una buena estructura garantiza su capacidad de guarda.
Seguimos viajando….
Volvemos a cubrirnos el rostro, la música cambia junto al nuevo paisaje. Vuelve esa voz cálida. Los viñedos descansan sobre pequeñas lomas, el viento procedente del mediterráneo rompe sobre las altas montañas al fondo, el clima se vuelve más seco. Llegamos a Elciego en la Rioja, lugar donde Bodegas Masaveu elabora Murua.
Situados en este nuevo emplazamiento catamos tres vinos. Murua Blanco fermentado en barrica 2017 es un coupage que varía según la añada (Viura, Malvasía y Garnacha Blanca), expresivo, complejo, notas lácticas y de crianza muy presentes. Cambiamos a tinto con Murua 2016 un varietal Tempranillo con 18 meses en francés. Un rioja de corte moderno, desenfadado, en el que la complejidad aromática da paso a un vino con volumen, la sutileza de la crianza se acomoda con un buen bouquet. Cerramos con un vino de larga crianza, Murua reserva 2010 refleja un buen clásico riojano. Potencia en nariz, fruta madura, un buen paso por boca, complejidad para un final largo y elegante.
Una cata distendida…..
Para la cata de otras dos de sus elaboraciones, Bodegas Masaveu nos propone un cocktail donde los asistentes pudimos disfrutarlas de una forma más informal. Leda Viñas Viejas 2016 es su propuesta en Castilla y León, un vino ideal para la ocasión (un cocktail, aunque este vino aguantaría perfectamente toda una comida). Mucha fruta, especiado, el toque justo de la barrica con una buena entrada en boca, fácil de beber, un vino muy versátil.
Como despedida un propuesta no relacionada con el vino. Leda Viñas Viejasun sidra de hielo para la cual se empelan entorno a 20 manazanas por botella (37,5 ml.). Un producto diferente ideal para cerrar una comida. Digestivo, con buena acidez y bien integrada. Su dulzor está presente pero en su justa medida. Un buen descubrimiento.
Conclusiones….
Aunque parte de los vinos de Bodegas Masaveu me eran familiares, nunca dejan de sorprenderme. Los Albariños me eran desconocidos y me descubren unos buenos blancos, bien elaborados. Su crianza sobre lías potencia sus aromas y un factor a destacar es que permiten su guarda. Los tintos todos muy buenos, con calidad, elegantes, definiendo muy claramente su procedencia. Vinos muy recomendables. Y por último la sidra, un producto diferente al concepto que por sidra tenemos, pero que sin perder esa esencia de las sidras naturales llegó a sorprenderme.